lunes, 21 de diciembre de 2015

La CAME solicita que se revise la decisión de quitar trabas para compras por internet en el exterior

El secretario de prensa de la entidad empresarial, Vicente Lourenzo, explicó que el sector tiene "un problema de competencia desleal con los productos chinos" por lo que "era necesaria la traba que habían colocado".
etiquetas

La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) solicitó al Gobierno que revise la decisión de quitar las trabas para las compras por internet en el exterior porque en determinados segmentos de mercado va a ser difícil competir con productos chinos que ingresan con dumping y subsidio a la exportación.

"Nosotros tenemos un problema de competencia desleal con los productos chinos; era necesaria la traba que habían colocado", dijo el secretario de prensa de CAME, Vicente Lourenzo, en declaraciones con radio Delta.

"Siempre un producto chino va a ser más barato que uno argentino, porque (en el país asiático) hay dumping, subsidio a la exportación, salario de miseria que en dólares es imposible competir, no sólo para la Argentina, sino para el resto del mundo; las
compras por internet facilitan el acceso de esos productos chinos a todo el mundo", describió.

Además, dijo que "desde CAME pedimos que se revise esa decisión (de quitar las trabas) porque en determinado segmento de mercados va a ser difícil competir con ellos. Antes que la AFIP pusiera trabas a la exportación, se podía comprar cualquier cosa".

"La juventud, que tiene más acceso a redes sociales e internet podía comprar hasta una patineta, repuestos de productos, juegos. una gama inmensa de productos que metidos en una caja pueden viajar miles y miles de kilómetros hasta llegar a destino", afirmó.

Al preguntársele cuál es el límite al ingreso de productos dijo que "nadie debe prohibir la compra de nada en el mundo, pero muchos países lo que hacen es colocar trabas arancelarias o para arancelarias para que ese producto llegue a destino, para que no le sea tan fácil competir con alguien que paga impuestos localmente, que da empleo, que paga cargas sociales", afirmó.

Lourenzo consideró que para evitar que se afecte el trabajo argentino "no hay que hacer un cierre total de la economía, pero estudiar perfectamente cuál es el producto que ingresa y cual no".

Sobre el levantamiento de las Declaraciones Juradas Anticipadas de Importación (DJAI) dijo que "confiamos en los dichos del ministro de Producción, Francisco Cabrera, que nos aseguró que hay mil posiciones que serán licencias no automáticas, lo que significa que no se van a poder importar libremente esos productos, sino va a tener que ser tras un estudio de la secretaria de
Comercio que permita ver si ese producto puede afectar a la industria nacional; además, habrá 17 mil posiciones que serán de libre importación", aclaró. 
 
Fuente:Telam

jueves, 30 de abril de 2015

El clásico pymes vs. bancos


EL BANCO CENTRAL BUSCA AUMENTAR EL FINANCIAMIENTO PRODUCTIVO

“Si va un empleado mío a pedirte un crédito al consumo se lo das, pero a mí no me financiás capital de trabajo”, fue el reproche de empresarios pymes ante banqueros en un encuentro convocado por el BCRA. Las razones de unos y otros

Por Cristian Carrillo
El Banco Central abrió ayer un canal de diálogo directo entre banqueros y pequeños y medianos empresarios. El presidente de la autoridad monetaria, Alejandro Vanoli, recibió a directivos de bancos públicos y cooperativos que integran Abappra y a representantes de la Unión Industrial, Federación Agraria, la CGE, Cgera y Apyme. El objetivo fue analizar los cambios introducidos en la Línea de Crédito para Inversión Productiva (LCIP) en diciembre último, los cuales se focalizaron en las micro y pequeñas empresas. Sin embargo, la discusión se extendió a la falta de atención que recibe este segmento productivo en general; es decir, por fuera de los planes oficiales. Los mecanismos “poco amigables” para las pymes, la falta de segmentación y la escasa posibilidad de financiar capital de trabajo fueron los principales reclamos de los empresarios. Los banqueros se defendieron con el argumento de que las pymes “están flojas de papeles”. Vanoli ofició de mediador para alentar el financiamiento de un sector clave en la economía.
“Si va un empleado mío a pedirte un crédito para consumo se lo das y la firma que los respalda es la de mi empresa”, fue la respuesta de Raúl Zylberstein en un cruce con el titular del Credicoop, Carlos Heller, que se quejaba por la informalidad del sector. “Es más, vienen del banco (de origen extranjero) a mi fábrica para ofrecer créditos al consumo y no me atienden cuando pido un préstamo”, agregó el empresario del rubro marroquinero. El reclamo de los empresarios fue por las dificultades en el acceso al crédito, independientemente de las líneas oficiales. “Se vanaglorian de haber elevado el año pasado del 24 al 50 por ciento la participación de pymes en el segmento productivo, pero la mayor parte de esa suba responde a la actualización de los montos para ser considerados pequeños y medianos, lo que comenzó a incluir firmas grandes en la medición”, sostuvo Zylberstein.
Es la primera vez desde la salida de Mercedes Marcó del Pont del Central que se realizan este tipo de encuentros, los cuales continuarán la semana próxima con las mismas cámaras empresarias y los representantes de bancos de capital nacional y extranjero, Adeba y ABA. Vanoli hizo una breve introducción sobre la necesidad de profundizar el acceso al financiamiento por parte de este segmento de empresas y luego abrió el juego para que las partes expongan sus reclamos. La única condición que impuso fue que “no haya declaracionismo político” sino propuestas y pedidos concretos. Entre las propuestas concretas que analizará el Central se encuentra la posibilidad de utilizar el descuento de instrumentos de obra pública como herramienta de financiamiento y un mayor acceso a crédito privado para capital de trabajo. Por su parte, Ricardo Khayat, vicepresidente pyme de la Unión Industrial Argentina, pidió “que no haya limitación de tiempo para la línea de cheques de pago diferido”.
Un punto sobre el que continúan la rispideces es la segmentación de las líneas de crédito. Las cámaras pymes habían denunciado el año pasado que los bancos, dentro del segmento considerado pyme, prestaban a las firmas más grandes. Vanoli introdujo –entre otros cambios– un esquema de incentivos para que presten a las más pequeñas dentro de la categoría pymes. No obstante, continúa pasando en las líneas de crédito convencionales. En este caso, el Directorio del Central deberá modificar la normativa para poder discriminar entre las distintas realidades del segmento pyme.
“Aprovechando que están los bancos deberíamos ser agresivos este año que es electoral para apoyar a aquellos que vayan a sustituir importaciones”, señaló el presidente de Cgera, Marcelo Fernández. Heller sostuvo que existe vocación para acercar el crédito a las pymes. “Pero no creo que sea compartida por el conjunto del sistema financiero”, agregó. “Seguimos firmes en el diálogo para asegurarnos de que las herramientas crediticias tengan el mayor alcance posible, llegando a las empresas que más las necesitan”, afirmó el titular de la CGE, Ider Peretti. Según les manifestó Vanoli a los presentes, la intención es iniciar rondas de trabajo para hacer un seguimiento intensivo sobre estos temas.
Fuente: Página/12